lunes, 29 de abril de 2013

Futuro repartido: el periodismo postindustrial en Perú

“El futuro ya está aquí. Solo que está repartido de modo desigual”. Esta reflexión del escritor William Gibson citada al inicio del libro ‘Periodismo postindustrial: adaptación al presente’ revela, en gran medida, la situación a la que nos enfrentamos los periodistas en Perú: una realidad heterogénea que avanza a su propio ritmo incrustada en un escenario global que parece avanzar a empujones desde hace cinco años.

El periodismo ha experimentado cambios drásticos en todos sus niveles en la mayoría de países industrializados en los últimos tiempos. La democratización de la tecnología ha permitido que registrar y comunicar sucesos en tiempo real no sea una actividad privilegiada gracias a las redes sociales. La capacidad para producir y difundir información propia se ha proliferado al límite, permitiendo que cualquier persona pueda comunicar su punto de vista sobre su campo de acción, cada uno con distinto grado de relevancia y, por ende, publicidad.

Todos estos cambios son registrados continuamente por la academia periodística a nivel mundial y, algunos más pesimistamente que otros, alertan del cambio necesario en el modus operandi. La tecnología ha creado nuevos consumidores de noticias, con diferentes y nuevas capacidades, a los que los medios tradicionales (y aún poderosos) tendrán que readaptarse a todo nivel: financiación, recolección de información, producción, distribución y marketeo. Todo esto, claro está, en el menor tiempo posible –y, si alcanza el tiempo, antes que la competencia.
Este escenario postindustrial se da a partir del señalado cambio de consumidor (vuelto en usuario) a través de su contacto y adaptación a las nuevas tecnologías; en otras palabras, por la adquisición de nuevas capacidades, por recibir nuevos súper poderes. En Perú, sin embargo, la capa roja de Superman aún no alcanza todos sus rincones, para beneficio de su (todavía existente) industria periodística.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Políticamente correcto. Sobre los conflictos mineros y la última encuesta.

Durante las últimas semanas, los conflictos en torno a la minería desatados en Andahuaylas, Cajamarca y Áncash han dado muchas carátulas para los diarios y, acorde a las cifras de la última encuesta de Ipsos Apoyo, poco conocimiento real del tema. Y es que, promediando el porcentaje de personas que no conoce respecto a estos tres casos, obtenemos un nada despreciable 34%.Cifra, por lo demás, opacada por la opinión de las personas que sí conocen al respecto.

Si bien las personas al tanto de los conflictos, aproximadamente el 62%, pueden generar una opinión mayoritaria políticamente correcta –en el caso de los tres conflictos, alrededor del 57% cree estar de acuerdo con los motivos de estos–, es por lo menos preocupante que quienes no conozcan sean un tercio de la población. La explicaciones para este escenario pueden ser difusas: cantidad de temas en la semana, fracaso en la labor comunicativa o simple desinterés de algunas (cientos de miles de) personas.

Fuente: La República

Lo que no es tan difuso es uno de los más importantes efectos de una actitud como esta: imaginar un país totalmente distinto al real. Y es que los conflictos de esta índole, recurrentes desde hace ya algunos años, más allá de los resultados y el estado de las cosas a su término, se han vuelto un pequeño microcosmos de la realidad peruana.

Estos conflictos representan de manera precisa a los agentes que intervienen, por decirlo de alguna manera, en los procesos económicos que, curiosamente según algunos de estos agentes, “hacen funcionar al país”. Compañías mineras que no son más inversionistas que Coca-Cola, un Estado objetivamente lento y burócrata, una población a la que se obliga a acceder a nuevas circunstancias de vida –más allá de si les viene bien o no, de si lo prefieren así o no–, y otro sector de la población que observa/se queja/celebra siempre desde atrás. Esta es la lógica de los conflictos mineros, algunos con más charlas y abrazos, otros con más fuego y sangre.


Quino...

Un tercio de la población no conoce sobre esto, ergo, no tiene asumidas estas simples y necesarias estructuras para comprender a l Perú. Con este escenario, solo nos queda esperar que las personas que sí conocen sobre el tema, que son, a mi parecer, una nada tranquilizante mayoría, puedan ser más que políticamente correctos. Ser más que una cifra que, si bien deja una buena impresión de lejos, deja mucho que desear de cerca.

domingo, 29 de mayo de 2011

Debate presidencial - 2da Vuelta

Nuevamente, con ayuda de una de las innumerables herramientas que ofrecen las TICs, llega el debate presidencial tuiteado y comentado por el 4° año de Periodismo de la UARM. Sigánlo aquí:


sábado, 28 de mayo de 2011

Ningún día es como todos

Hoy, sábado 28 de Mayo, es un día no como todos. En realidad, ningún día es como todos.

Con elecciones y debate presidencial . Con el Presidente de la República siendo citado a Poder Judicial. Pero, también, con la caótica situación en Puno. Con un ex dictador con unos cuantos dólares por pagar. Con un pueblo en el mundo que se empieza a sentir más libre. Y, también, con un gran partido de fútbol, el más esperado de la temporada.

Con todo esto y más, hoy no es un día como todos. Aquí presentamos y ampliamos por qué creemos que no es así. Un ranking pensado para la persona que está despertándose mientras esto se escribe.


10. “Sepa en qué vías se restringirá el tránsito vehicular por el debate del domingo” Fuente: El Comercio